ETA EN TREGUA

Dicen estos imbeciles que dejan de forma temporal, y a la vez de forma indefinida, la lucha armada.

Yo no estoy entre los que les tiemblan las piernas pensando que el abandono de las armas por parte de estos asesinos podría llegar a ser para ellos una pérdida de votos o un fracaso electoral.
Yo no estoy entre los que dan palmas esperando que este abandono de la lucha armada les permita cosechar los triunfos que no han sido capaces de sembrar con su buen hacer diario..
Yo estoy más entre los que se alegran pensando que pasarán unos cuantos meses, ojalá años, ojalá siempre, en los que no tendremos que lamentar la muerte de ningún inocente por las manos de estos asesinos.
Yo estoy más entre los que se conforman con un día de tregua, incluso con un minuto, si eso significa que así se establecerán de forma definitiva las bases imprescindibles de un futuro sin miedo y sin muertos.
Pero tampoco debemos ser tan cortos de mente como para creer que esto ha surgido de la nada, como para pensar que la lucha diaria de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado no ha sido el principal motivo por el que estos tipos se han visto obligados a parar en su locura. ETA no termina hoy, ni siquiera terminará el año que viene, pero lo que sí está claro es que están en sus últimos momentos. Están derrotados.
Necesitamos el corazón fuerte y la mente fría para poder soportar lo que ahora nos va a venir. también necesitamos una nueva capacidad para ser capaces de digerir la presencia en la vida pública del brazo político de los terroristas. Será imprescindible.

Lamentablemente esto no ha hecho más que empezar, pero ya se ve el final del tunel....